lunes, 5 de abril de 2010

Suena Putumayo con sabor a calabaza


No tenía idea de lo que era Putumayo hasta que un compañero del laburo, con mucha generosidad, lo sumó a la música que compartimos durante 8 horas cuatro días a la semana. La música de la PC 2 tiene un repertorio muy amplio que pasa por todos los estilos pero sin embargo no había nada similar a Putumayo. Parece que es un sello que reúne artistas varios alrededor del mundo y los junta en diversos compilados. Sonidos del Brasil, de África, de Cuba, de la Argentina, aparecen en estos discos, que de la compu del trabajo viajaron en pen drive hasta la consola de mi casa.
El sábado venían las chicas y decidí cocinar un soufflé de calabaza, ese que se hace con calabaza, puerros, huevos, queso crema, y condimentos: sal, pimienta, pimentón, ají molido, nuez moscada. Mientras, escuchaba uno de los discos de Putumayo, el de Cuba, que empieza con un tema de Ibrahim Ferrer, y sigue con artistas deliciosos.
La tarde noche transcurrió entre un huevo batido, un paso de baile y un leve intento de entonar una canción, y para cuando llegaron las chicas, ya estaba todo cocinado.

miércoles, 24 de marzo de 2010

Donato + Seu Jorge = bocatto di cardenale

El tiramisú es originario de Italia, así que para hacerlo en casa hay que ir a las fuentes. Un cocinero italiano muy carismático y relativamente popular que está cerca nuestro es Donato De Santis, el mismo del Gourmet, el mismo de alguna que otra publicidad de alimentos. Además de ser un canchero, Donato es bueno en lo que hace. Recuerdo con mucho sabor una focaccia y, ni hablar, del tiramisú.

Es un postre que no hago muy seguido por varios motivos: es una bomba, hace falta mucha gente para terminarlo, y es muy costoso, no solo por lo caro de su ingrediente principal, el mascarpone, sino porque es bastante difícil conseguirlo. De hecho, es muy común que en los restaurantes reemplacen el mascarpone por cualquier queso crema, lo que, obviamente, afecta al producto final.

El de Donato es un tiramisú completo, redondo, hasta las vainillas son caseras. Lleva varios pasos pero aseguro que vale la pena. Para ponerle un toque latino a este manjar tan italiano, tan europeo, tan sofisticado, me inspiré con la infalible onda de un brasileño: Seu Jorge. Un moreno que canta muy lindo, hace una música de esas que acompaña hasta el final, que no se queda en veremos. Donato y Seu Jorge, dos talentos per se, que brillaron juntos en mi tiramisú.

jueves, 11 de marzo de 2010

Cheesecake + Let it bleed


No sé si será que la tapa del disco Let it bleed de los viejos y buenos Rolling Stones me inspiró o qué, pero lo cierto es que a pesar de que se me quemó un poco, el cheesecake me salió bien clásico.
Hay que batir 200 gramos de queso mascarpone + 650 de queso philadelphia + 180 de azúcar + 100 cc de crema de leche + ½ taza de maizena + la ralladura de una naranja + 3 huevos (se sugiere batir las claras por separado para que quede más espumoso).
Pero antes se muelen dos paquetes de galletitas –las vocación de ayer, o las maná de hoy– y se les agrega 150 gramos de manteca derretida, se pone en la tartera, solo unos acordes al horno y sale para ser rellenado con la mezcla batida. Eso vuelve al horno alrededor de 40 minutos y se saca para ser decorado con mermelada de arándanos y, si es la época, también, arándanos frescos.
Lo comimos sin música porque, la verdad, es que suena solo. Y cómo suena.

miércoles, 17 de febrero de 2010

Guacamole reversionado + Martín Buscaglia


El guacamole es un clásico de la cocina mexicana que ya hace algunos años se volvió un clásico de mi cocina. Apenas lo conocí lo adopté como un aliado buena onda, que te saca de un apuro, que siempre te salva y te hace quedar bien. El guacamole es fácil, muy fácil pero tiene un ingrediente que es la figurita difícil: el cilantro. A pesar de que a simple vista es muy parecido al perejil, no se consigue en cualquier lado, muchas veces te lo cobran caro y en verano, con el calor, desaparece del mercado.

El otro día, todo estaba dado para saborear un delicioso guacamole: Martín Buscaglia cantaba fuerte, con ganas, con ritmo: 'Gracias cerebro por dejarme en paz', yo abría la heladera y la palta estaba justito para comer, un tomatito solitario me decía: 'dale loca, con un poquito te alcanza' y una cebollita también me animaba. El frasco de picante, ansioso porque lo destape y así volver a respirar. Lo que no estaba, lo que no tenía y lo que no iba a conseguir, era el cilantro.

A pesar de eso, no me acobardé, pensé en un reemplazante y aunque no exista nadie como él, se me ocurrió ir a la terraza donde tengo una mini planta de albahaca que tiene un aroma... increíble. Saqué algunas hojitas y me armé un guacamole reversionado.

Lo llevé a la mesa y la verdad es que no defraudó, al contrario, se la bancó bien y se convirtió en una gran alternativa para cuando el cilantro escasea. Eso sí, para que salga óptimo tiene que ser acompañado por la música de Martín. "Gracias Martín por dejarme en paz".